Desde que me divorcié hace más de 14 años, y me di cuenta que lo que sentía no era amor, he estado buscando inutilmente la puerta mágica de una realidad que cada día se hace más difícil de encontrar. No doy con la persona adecuada, me ilusiono con imposibles; siempre he sido yo la que da el primer paso, pero las dos relaciones (matrimonio y amante de un hombre casado),que he tenido se basan en la lástima y compasión, no siento que llenen mi corazón. Ya no tengo esperanza, quiero parar la búsqueda por tierra, ciberespacio, he ido de fracaso en fracaso, solo encuentro estafadores y él que me hizo sentir estrellas y fuertes palpitaciones en mi corazón me acaba de cortar las alas porque ya tiene un amor. Me he dejado llevar por mi soledad y mis fuertes deseos de conseguir un amor intenso, un hombre que de verdad me ame y lo que consigo es literalmente desprecio; la bondan y mi espiritu de dar y entregarme sin pedir nada a cambio, mi nobleza, mi sensibilidad parece que no son suficientes; qué puedo hacer la juventud ya paso, lo que siento y quiero es un amor que se interese más por mi que por mi cuerpo. Soy una conservadora que aprende de los cambios; digo abiertamente lo que siento pero salgo aplastada. derrotada.fracaso,