Yo tenía mi novio Manuel con el que me llevaba super bien, éramos muy comptibles. Y sobre todo, muchísima confianza. Incluso durante todo esto que les voy a contar el habló conmigo y me dio consejos sin importarle a el cuanto le doliera. Incluso fue él quien me dijo que tuviera una relación con Roberto con tal de aclarar lo que sentía por él ya que llegue a sentirme muy confundida y mal al respecto. Aún cuando yo me rehusé a esa idea muchas veces y terminé aceptando, el siempre estuvo ahí para apoyarne y aconsejarme en todo.

Un día se me dio la oportunidad de viajar a cierta ciudad donde casualmente me encontré con mi primer amor y con quién había dejado una relación amorosa pendiente... Nos dimos cuenta automáticamente que ambos sentíamos una gran atracción mútua y por terminar algo que habíamos dejado pendiente el me besó. Cosa que la verdad me dejó en shock emocional pues no entendía como es que aún sentía eso, y que nunca creí que el sintiera lo mismo. Sin embargo, después de eso me enteré que este Roberto se había casado. Lo que me hizo sentir peor. Y se casó para poder ayudar a esa mujer con unos beneficios que él tenía por su trabajo, ya que la hija de ella estaba muy mal. El género codependencia a esta mujer y quizá una especie de amor enfermizo. Ella lo supo y lo trataba terriblemente mal (lo vi) y se aprovechaba de el hasta dejarlo endeudado al tope. El la dejó, pero no antes de que ella metiera miles de denuncias en su contra (todas comprobables de ser falacias) pero dejándolo aún más ahorcado en deudas.
Por otro lado, yo al ver eso decidí apoyarlo como amiga ya que el me había ayudado muchísimo en un pasado a salir adelante de un gran problema que tuve. Poco a poco, me fui enamorando de él y lo amé con locura. Pero siempre poniendo su bienestar antes que el mío.
Su familia me invitó a vivir con ellos en su casa, pero con mi propia habitación. Me trataban bien al principio.
Su familia obviamente me veía mal, y me trataba mal. Pero poco a poco el hizo lo mismo. Sobre todo en cuanto me tuvo, y si hablo de que lo hicimos y para mí había sido lo más hermoso del mundo.
Siempre yo estuve en último lugar, yo era la mentirosa y le ocultaba cosas. Y todo esto porque su familia le hacía creer eso. Además de que no me defendía cuando ellos me agredian, aún cuando éramos solo amigos.
Él me llegó a decir que me amaba y yo hacía todo lo que el quería con tal de verlo feliz. Pero no era suficiente. Comenzó a decirme "si te quieres ir vete". Y cosas peores.
Me di cuenta que me deje pisotear mucho, pensé que había cometido un gran error al en primer lugar haber hecho todo lo que hice y haberle hecho tanto daño a quien me amaba tanto. Una última noche me volvió a decir "si te quieres ir, las puertas están abiertas, no me interesa" y justo después de eso se durmió. Entonces no dude en comprar mi boleto para ese mismo día, y en la mañana le di la noticia de que esta vez sí me iría. Para lo que si m pidió que me quedara pero también fue muy grosero y también me dijo que no iría porque la verdad no le interesaba. Lo que me hizo reafirmar mis ganas de irme. Me llegué a ir diez horas antes de mi vuelo con tal de no tener que toparme con ninguno de sus familiares. Pero aunque fui muy entusiasmada, fui con mucha tristeza por la desepción y aún así me imaginaba que lo vería en el aeropuerto.
Total, regresé. Y aunque lloré como loca con mi mejor amigo, por todo lo que hice aún en contra de mi moral, me sentía Tan aliviada y bien!
El no dejaba de mensajearme y cada que le respondía, pasaba de decirme cosas hermosas a agrederme. Lo que poco a poco me hizo enojar muchísimo y la gota que derramó el vaso fue que uno de sus parientes me empezó a mensajearme diciendo que me fui para acostarme con gente y que no me fui porque yo me sintiera mal!
Entonces apague mi teléfono un día exacto, y en cuanto lo prendí me entraron miles de mensajes de Roberto por todos lados. Pude ver su transformación de enojo, angustia, amor. Fue raro...
Y zaz! Me entró una llamada y era de el. Me daba las gracias por responderle y le daba gracias a Dios porque yo estaba bien. Me pidió perdón de mil y un maneras y me dijo que en ese tiempo pensó muchas cosas y se dio cuenta que en verdad me ama. Pero yo por primera vez había sentido ira. Fue tanta que casi me desmayo de la migraña que me ocasionó. Y yo no dejaba de criticarlo y decirle el daño que me hizo. Y eso solo me hacía apreciar más lo que Manuel había hecho por mí.
Volví a apagar mi teléfono. Y cuando lo prendí leí: Llegó a las seis am a tu aeropuerto!
Entré en pánico, estrés! Y caí dormida. Llegué por el al aeropuerto, caminamos. Me dijo que creía que habia vuelto por qué tenía interés romántico en alguien y eso me hizo enojar más.
Pero pasó el día y me di cuenta que ya no me veía como objeto. Me veía hermoso y sus ojos brillaban. Y me pidió una oportunidad de demostrarme que lo que viví con el solo fue una mala etapa. Me pidió dos meses de prueba. Me dijo que en verdad había cambiado y que quería demostrarmelo, que le diera una oportunidad.
Siempre lo rechacé hasta el momento en el que ya se iba a ir, sobre todo porque seguía chantajeando diciendo que si no aceptaba fue porque no lo amo y nunca lo amé. Pues me dije, si no lo doy la oportunidad me voy a sentir mal el resto de mi vida. Entonces fui pero le advertí que iba solo para que no dijera que no lo amo ni ame, y para intentarlo con lo de decía era su "nuevo yo". Y ahora al parecer los papeles se intercambiaron, aunque yo no soy vil como el fue, si me doy cuenta que estoy muy distanciada. Ya no le tengo confianza porque se que, aunque él me pregunta, hay cosas que no le puedo contar porque me las reprocha o me juzga. Y eso nunca ha pasado con Manuel. Le dejé de hablar a Manuel, por cierto, para que viera que si me interesa y porque ya no necesitaba alguien de suma confianza con quién hablar puesto que ya no me sentía mal.
Me la llevo pensando en que no soy feliz aquí. Que no me gusta la gente de aquí. Que vine por el, que vivo aquí por el, que si voy a trabajar aquí es por el y que mi dinero se va a ir en apoyarlo con sus deudas. Que tendré que posponer más mi universidad que deje trunca en mi ciudad natal por él porque no va a terminar de pagar sus deudas, que me dice "busca tu motivación, haz algo!" Y yo solo digo, que no vez que hago mucho al intentar vivir bien aquí? Su familia me sigue odiando aunque al principio de esta vez hasta "mi hijita" me decían.
Me quiere bajar todo, en verdad ha cambiado tanto. Pero aunque tengo cierto interés y/o curiosidad. No siento las mismas ganas de antes. Siento que necesito volver, solucionar lo que tenga que solucionar pendiente con Manuel. Poner en orden mis emociones. Etc.
Pero Roberto me dice que si vuelvo es porque nunca lo amé porque no intenté nada por salir adelante aquí. Y no es así! Pero es que no se que me detiene! Siento que su familia y sus problemas me asfixian!
Siento que volví a un agujero del que poco a poco no puedo salir y al que me metí por hacer sentir bien a alguien.
Yo no me sentía lista para volver. Estaba muy herida, y siento que trato y trato de maquillar ese dolor que sentía. Pero eso solo me causa conflictos de pareja y ahora hasta con otras personas.
No digo que no lo ame, pero quiero sentirme en paz conmigo misma. Está mal que quiera volver? Creen que lo ame? O que creen que sienta?
Siento que quiero huir de tantos problemas porque esos problemas me afectan emocionalmente y psicológicamente, sobre todo en mi autoestima. Siento que he perdido gran parte de mi escenncia y siento que no hago las cosas por iniciativa propia.
Y últimamente he considerado que debería hacer todo por recuperar a Manuel. Pues el aún siente cosas por mí y aún nos tenemos tanta confianza como en aquellos días. No sin antes darme un tiempo para mí. Que incluso el me llegó a decir que necesito y que si algún día quiero buscarlo, que lo haga.
Ahhh!! No sé qué hacer!