Él tiene 15 años y yo 18 (soy 2 años y medio mayor que él) y nos conocemos desde hace poco más de dos años gracias a su hermano mayor y a Dios (literalmente). Al inicio me costaba bastante hablar con él, pero en estos últimos seis meses nos hemos acercado bastante, literalmente nos hemos visto en piyama y sabe cosas de la peor etapa de mi vida. Nunca lo había visto como una opción, por lo de la diferencia de edad principalmente, e incluso lo molestaba con una amiga con la que creo que haría buena pareja. La cuestión es que hace relativamente poco se me declaró y yo no supe que decirle. Me puse a comparar los pros y contras y me di cuenta que todo de él me gusta e incluso esta bien con el hecho de que yo sea asexual (osea que no siento atracción sexual hacia ningún género). Pero en sí no siento atracción romántica hacia él y no me imagino como cambiarían las cosas sí andaramos. Mientras más lo pienso más ganas me dan de intentarlo pero al mismo tiempo, basándome en una experiencia anterior, estoy bastante segura que lo terminaría arruinado. Tenemos un mismo grupo de amigos y nos vemos todos los sábados, y no quiero que si terminamos mal las cosas se vuelvan incomodas o alguno de los dos se termine alejando. Aparte de que aprecio muchísimo su amistad, lo que me hace preguntrme. ¿En verdad vale la pena intentarlo?