Es sobre el posible fin de una relación de un año que fue muy intensa y feliz pero las cosas cambiaron radicalmente.
Yo tengo 22 y él 28.
Ambos tenemos personalidades muy únicas. Yo no soy la típica mujer ni él el típico hombre. A mi me cuesta mucho trabajo abrirme con alguien y ser muy cariñosa pero a petición de el lo hice. El era muy muy amoroso y atento conmigo como nadie lo había sido, no tenía de que quejarme.
De pronto dio un cambio drástico y se empezó a portar seco y distante, despues de varios días así hablé con él, y me dijo que se sentía deprimido por la situación difícil que hay y desmotivado de todo que no quería transmitir su negatividad y contaminarme a mi y a quienes le rodean. Ya que era evidente que no tenía ganas de estar conmigo por lo menos esos días le dije que talvez necesitaba estar solo consigo mismo y ya se sintiera mejor ahí estaría yo. Pero ya pasó un mes que no nos hemos visto y no me ha hablado para nada. Ahora me siento decepcionada y poco valorada.

¿Que hago? Se lo digo o sigo adelante y le pongo fin. La verdad me duele mucho.